LA CUESTIÓN POLÍTICA, ABREVADERO INFINITO PARA EL ARTE ACCIÓN
México, 1976
hoyosdegusano.blogspot.mx
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Dentro de la diversidad de disciplinas artísticas, el arte acción-performance ocupa un espacio paradójico y contradictorio. Es al mismo tiempo alternativo, mainstream, poético, conceptual, teórico y visceral.Es una disciplina que ha logrado el reconocimiento de los museos de arte contemporáneo más importantes del mundo; un arte periférico; aleccionador y educativo hasta el cansancio; libre de intenciones evangelizadoras; poderosamente sutil; obligatoriamente escandaloso; camuflado en la realidad cotidiana; un parásito alimentado de la moda en turno; una disciplina autónoma; pocas veces central en las exposiciones museísticas; un tema sobre el que teoriza la academia; acotado a ejes temáticos delimitados; abierto a múltiples lecturas; tan cercano a la vida como ajeno a ella.
Este conjunto de polos conforman un entramado de nodos que estiran de continuo la disciplina y en cuyos cruces se asientan numerosas prácticas; entre ellas el activismo político que se aborda desde diversas posturas. El gesto artístico político como puente de comunicación y protesta; como impartición adoctrinadora de la verdad absoluta; como cuestión prioritaria en las agendas culturales internacionales del arte contemporáneo que dictan los temas preponderantes: como necesidad ante la apremiante situación social-económica-política-cultural del contexto local. El espíritu de la época que nos impele.
El performance puede llevarse a cualquier lado, es tan portátil como el cuerpo mismo, por lo que resulta un medio idóneo para integrarse a la protesta. En México es una práctica común incluir en la protesta diversidad de actos2 relacionados con el tema de la manifestación cuyas características los emparentarían con el arte acción, excepto porque no desean ser arte. A finales del siglo pasado los llamábamos performances involuntarios; pero no con deméritoalguno, sino como muestra de nuestro innegable espíritu performancero.3Un caso paradigmático es el Movimiento Nacional de los 400 Pueblos, quienes llevaban años protestando por incumplimiento de acuerdos y violación de derechos sin que la opinión pública reparara en ellos, apenas ocasionalmente conseguían una nota en el periódico de izquierda (las manifestaciones campesinas en la Ciudad de México son parte del paisaje). Un cambio radical sucedió en el 2001 cuando los manifestantes se desnudaron. Era una metáfora sobre la vulnerabilidad, un gesto imposible de ignorar; todos los periódicos y canales de televisión cubrieron la noticia. Habían dejado de ser invisibles. Los 400 Pueblos han agregado otras acciones a su protesta; usan como taparrabo fotografías de políticos y bailan cumbia por horas afuera de las instituciones gubernamentales.
En México las acciones performáticas de índole político han estado presentes en los movimientos sociales por mucho tiempo. Algunas surgen como estrategia de comunicación de diversas organizaciones; otras tantas, desde la década los setenta, son arte acción de protesta. Ambas son parte del activismo. Al mismo tiempo, durante casi veinte años los museos, curadores y artistas contemporáneos renombrados desdeñaron las obras relacionadas con política. Podían perdonarlas si eran universales; la obra podía ser específica si se refería a temas internacionales como la invasión a Irak, pero jamás si versaba sobre conflictos nacionales.4 Esta repulsión se explicaba con la frase: «es muy ochentas».5 Aparentemente, en un universo paralelo, habíamos superado todas nuestras precariedades desde esa época; en paz y legalidad convivíamos en medio de la justa repartición de los bienes. A pesar de este ambiente general de bienestar, muchos artistas reacios insistían en abordar temáticas de corte político. Quiero mencionar a dos que, en distintos sentidos, han trabajado pertinentes piezas de largo aliento, desde una postura lúdica, donde el humor ácido es parte central de la obra.
Mónica Mayer detonó, en 2012, La protesta del día después, un performance / manifestación colectiva, cuestionando prejuicios sociales y religiosos en torno a la maternidad. Esta pieza aglutinó los resultados del proyecto Una maternidad secuestrada es _____, discusión abierta en redes sociales sobrela falta de garantías y libertad para que toda mujer tenga una maternidad voluntaria, gozosa y responsable. La protesta versó sobre justicia social; garantía de derechos reproductivos; educación sexual; vivir en Estado de derecho; y rescatar el Día de la Madre de la comercialización para convertirlo en día de acción y reflexión. Mayer trabaja el tema desde tiempo atrás tanto individual como colectivamente. Madre por un día (1987), acción del colectivo feministaPolvo de Gallina Negra, que Mónica conformó con Maris Bustamante, da al conductor de un popular programa de televisión la oportunidad de experimentar el embarazo: le ponen una panza postiza, mandil y corona de reina del hogar, para iniciar un diálogo sobre la maternidad, que es transmitido en vivo por la única cadena nacional de esa época.
Katnira Bello, Apariciones, 2010. Manta marcada con los cortes a las rosas. Perfomagia 1 a 7. Museo Universitario del Chopo, Ciudad de México. Foto: Luz María Carmona.
La noche de las elecciones presidenciales del 2006, dos candidatos se declararon triunfantes al tener porcentajes de votos casi iguales en los resultados preliminares; el Instituto Federal Electoral informó que pospondría dos semanas el resultado oficial.6
A la mañana siguiente, Víctor Sulser se puso una banda presidencial autoproclamándose presidente de la república y salió a la calle; dando inicio a un performance continuo que duraría todo el sexenio. Si había dos presidentes, entonces podía haber tres. Al principio lo increpan tanto militantes de izquierda como de ultraderecha; pues ambos se han sentido atacados por las connotaciones de la obra. En la vía pública lo detienen policías y militares demandando que se retire la banda; responde que ninguna ley prohíbe traer una bandera.7 La gente por la calle entra espontáneamente al juego: estrechan su mano, bromean con él, le piden empleo o mejoras para su barrio, lo presentan ante sus hijos como el presidente auténtico. Algunos espacios culturales le cancelan invitaciones tanto para presentar performance como para participar con ponencias en mesas académicas. Presenta performances presidenciales donde da discursos que parodian el habla del clásico mandatario mexicano mezclado con el de Cantinflas. La acción invita no solo a jugar sino también a tomar posición respecto a la obra. Sin la aprobación institucional, artistas y organizadores lo invitan a inaugurar eventos y exposiciones en complicidad con la obra; otras veces lo hace sin invitación. Alrededor de la pieza continuamente se generan diálogos, entre los asistentes o entre quienes le ven pasar por la calle, acerca de temas como la situación política, la sucesión, la corrupción y el aumento de la violencia. El performance es un recordatorio constante sobre lo poco fiable de nuestra democracia.
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Los poco confiables procesos electorales mexicanos y su vacua propaganda fueron tema intermitente de mi trabajo por casi diez años. Durante la campaña electoral de 1997, propuse a algunos amigos hacer algo con la propaganda de pendones plásticos que tapizaba la ciudad. Charlamos sobre el gasto que significaba producir toda esta basura en contraste con múltiples necesidades urgentes no atendidas. Decidimos protestar al respecto afuera de las oficinas principales del Instituto Federal Electoral (IFE), organismo regulador de todo lo referente a las elecciones, incluyendo presupuestos y propaganda. Por las noches, clandestinamente8, recolectamos suficiente material de plástico para luego diseñar objetos relativos a temas en los que valdría la pena invertir esos fondos, como la atención a damnificados de desastres recientes y la educación. Por ello hicimos una mesa escolar con su silla y numerosos libros; colgamos sobre una cuerda de veinte metros diversas prendas de ropa y herramientas; y pusimos una gran tienda de campaña. Titulamos nuestra protestainstalación-propuesta El uso de los desusos, póngase buzo9,e incluimos enella carteles explicativos que fijamos en la pared del IFE. Los transeúntes se detenían a leerlos y a mirar nuestro tendedero. De las oficinas gubernamentales salieron a fotografiarnos; luego llegaron dos patrullas policiacas a preguntar cuáles eran nuestras demandas. Mientras anotaban la información parecía irles agradando el proyecto. Tres de ellos pidieron libros y el serrucho como regalo. Accedimos.
Katnira Bello, Pequeña promesa, 2006. Modelaje de vestido a las puertas de la Asamblea Legislativa, Ciudad de México. Foto: Antonio Juárez.
Tiendas de campaña (2003) surge tras una invitacióna realizar una acción conmemorativa por el sismo de 8 grados Richter que en 1985 destruyó varias zonas de la ciudad. Recordé la poca ayuda del gobierno para los miles de afectados, al igual que las promesas de atender a los damnificados a cambio del voto. Mi acción coincidía con un periodo electoral, así que quise colocar tiendas de campaña —hechas con material de propaganda— sobre la avenida donde estuvieron las tiendas de refugio para damnificados y servicios médicos en el 85. Invité amigos al largo proceso tanto de recolectar y limpiar las pancartas, como de confeccionar con ellas tiendas de diferentes tamaños. Luego nos sumamos a la instalación para charlar con los transeúntes sobre la situación política. Repetimos la pieza cada domingo, en diferentes puntos de la ciudad, dialogando con la gente que se acercaba a preguntarnos qué hacíamos. Si bien estos proyectos resultaron muy satisfactorios, implicaban largos tiempos de producción al igual que dificultades de almacenaje y transporte. Razones por las que en mi siguiente trabajo —con las pancartas políticas— busqué algo más portátil: un vestido de fiesta para pasear por la ciudad los dos meses previos a las elecciones de 2006. La pieza se tituló Pequeña promesa y tenía como fin detonar diálogos acerca de lo poco que sabemos de las propuestas, intereses y experiencia de los candidatos —cual contendientes en concurso de belleza, los candidatos solo se preocupan por sonreír para la foto—. La gente hablaba mucho durante la acción; que yo estuviera sola parecía animarlos más a preguntar y opinar; y los grupos se alejaban platicando del tema. Puesto que de las piezas anteriores prácticamente no había documentación, un día registré el recorrido jugando con el concepto de sesión de modelaje. Durante las fotografías muy poca gente se acercó a charlar conmigo, pues la cámara suele resultar intimidante en los espacios públicos.
Katnira Bello, Insurgentes, 2004. Lectura de la biografía de Josefa Ortiz de Domínguez en vagón del Metro, Ciudad de México. Foto: Leticia Olvera.
Insurgentes (2004) fue una acción pensada exprofeso para la Glorieta de los Insurgentes y adaptada luego para los vagones del metro. Vestida con uniforme escolar, cargaba las biografías de diez héroes de la Independencia dentro de una lonchera adornada con Las Chicas Súperpoderosas (bastante más famosas que los primeros). Subía a los vagones imitando el pregón de los vendedores ambulantes para ofrecer sus productos: El día de hoy se va a llevar como una oferta, una promoción, de la historia de México, ¡un insurgente! Luego procedía a leer la biografía yfinalmente regalaba treinta ejemplares. Como no aclaraba su gratuidad, algunas personas me los devolvían excusando no traer dinero; entonces les decía: «la Independencia no se vende».
Me gustaba hacer piezas con temática social que tuvieran como botón disparador un giro sarcástico o absurdo, incluso una broma. Los últimos años resultó una característica muy difícil de mantener. Desde el 2010 he realizado Apariciones, una serie acerca de la violencia reciente y la lectura de esta como una aparición súbita, donde no había antes nada que la presagiara; una fantasía que perpetúan los medios, el gobierno y el pueblo. Durante la acción se escucha de fondo La Guadalupana, una muy conocida canción tradicional dedicada a la Virgen de Guadalupe,10 en una versión instrumental modificada que solo tiene voz en la frase «eran mexicanos». Sobre una manta corto 144 rosas rojas con un cuchillo largo, doy numerosos tajos de golpe para luego cortar finamente los pedazos. Cuando las rosas son solo pedacitos sacudo la manta y la cuelgo. La pieza es un juego de sentidos entre la aparición de la Virgen de Guadalupe en una manta y la desaparición de las rosas, destrucción y sacrificio sin sentido, para convertirse en numerosas marcas sobre la tela. Superpuestas e incontables huellas. La pieza hace alusión a las narcomantas11; a los criminales y las víctimas, todos ellos «eran mexicanos».
Contrapuesto a los problemas / soluciones del pretendido activismo universal, lo local me parece prioritario; aquello que puede resultar culturalmente incomprensible al otro lado del mar sin un preámbulo de al menos cinco minutos. Me parece urgente tratar la temática de nuestra autodiscriminación racial, un problema grave que nos importa poco. Los temas sobre los cuales es posible crear obra política y social son, tristemente, inagotables. Han sido parte importante de mi producción desde que me inicié en las artes; no sabría ni querría evitarlo por ningún motivo. A menudo me preguntan sobre la línea de mi obra, mi tema, en el entendido de que debiera tener uno solo, dos quizá. Haber sentado cabeza en estos veinte años. Monogamia creativa. Una postura que me resulta incomprensible. En cuanto al arte acción, tengo piezas sonoras, íntimas, crípticas, procesuales, rituales, participativas, poéticas, políticas, en espacio público, museos e incluso en video solo para Internet. Me interesa abordar el performance justo como el magnífico e inabarcable abanico que es.
Referencias
Alcázar, Josefina. 2006. Mujeres en acción. Serie documental de performance. México: Conaculta -Fonca, Ex-Teresa, Citru.
Círculo a. s.f. «“Grito de 15 de septiembre” de Víctor Sulser», en: Circulo a.com, Videoteca, Dossier.
Disponible en: <http://www.circuloa.com/grito-de-15-de-septiembre-de-victor-sulser/>, consultado el 27 de septiembre del 2015.
Hernández, Édgar Alejandro e Inbal Miller (eds.). 2013.
Sin límites. Arte contemporáneo en la Ciudad de México
2000-2010. México: RM - Cubo Blanco - Conaculta.
Mayer, Mónica. 2013. «La protesta del día después un año después», en: De archivos y redes. Un proyecto artístico sobre la integración y reactivación de archivos, domingo 19 de mayo. Disponible en: <http://www.pintomiraya.com/redes/archivo-ana-victoria-jimenez/item/94-la...és,-un-año-después.html>, consultado el 27 de septiembre del 2015.
Movimiento Nacional de los 400 Pueblos:movimientonacional400pueblos.blogspot.mx
*Texto presentado originalmente en el simposio The Shape of Things, en el marco de la 4a Trienal de Auckland «Last Ride in a Hot Air Balloon», que se llevó acabo del 12 de marzo al 20 de junio del 2010; y publicado en Third Text (2011, 447-457). Traducción de Viviana Mejía con el apoyo del equipo de Errata#.
2.Llevar una piñata con la efigie del personaje contra el que se protesta para deshacerla a palos al finalizar; un muñeco de cartón de quince metros de alto lleno de pólvora al que se le prende fuego para luego verlo explotar; un burro que pasea disfrazado como personaje político; un toro en una camioneta; danzantes prehispánicos; curanderos con copal encendido; lanzamiento de cohetes; huelgas de hambre; entre muchos otros.
3. Ejemplo de ello son las peregrinaciones de rodillas a la Virgen de Guadalupe; la procesión de autoflagelación en Semana Santa; la representación de la crucifixión; las diversas celebraciones del Día de Muertos, que van desde limpiar los huesos del difunto hasta ponerle una ofrenda en el hogar; las estrategias de los vendedores ambulantes y los merolicos, así como el desaparecido teatro de carpa.
4. Esta regla tenía su excepción con los artistas extranjeros, a quienes no se los acusaba de anacrónicos, y cuya producción siempre fue bien recibida por ser una mirada externa.
5. En cuanto la crisis económica invadió Europa (a mediados de los 2000) y con ella las protestas sociales, que entraron también al museo, esta frase no se volvió a escuchar. Por otro lado, las circunstancias nacionales actuales exigen una toma de postura imposible de postergar.
6. Dando continuidad al partido que se encontraba entonces en el gobierno, la presidencia se otorgó a la ultraderecha con un ridículo 0,58% de ventaja, en un proceso lleno de impugnaciones que jamás fueron resueltas.
7. Aunque sí existe en el país una ley que prohíbe portar una banda presidencial sin tener el cargo oficial.
8. Es ilegal retirar estos anuncios.
9. significa estar sumamente atento. Si eres o estás «buzo», no pueden engañarte.
10. Cuenta la leyenda que, en la época de la colonia, la Virgen de Guadalupe se apareció al indio Juan Diego para pedirle la construcción de un altar sobre el cerro del Tepeyac; el mismo lugar donde los mexicas adoraban a Tonantzin, su diosa madre. Nadie le creyó a Juan Diego, así que la Virgen le pidió recoger rosas en su tilma para llevarlas al obispo como señal suya, pues en invierno no crecían rosas; al llegar Juan Diego a ver al obispo y abrir su tilma para dejar caer las flores, había sobre ella una elaborada imagen: la efigie de la Virgen de Guadalupe. Este es uno de los mitos fundamentales en México, por lo que al templo donde está la imagen acuden cada año cientos de miles de peregrinos. La historia y la canción que la narra son conocidas por todos los mexicanos independientemente de las creencias religiosas que tengan.
11. Con el nombre de narcomantas se designan los carteles y mantas que colocan grupos criminales con mensajes para el pueblo, el cartel enemigo o el gobierno. Se trata de aclaraciones o amenazas; regularmente las ponen en la noche de tal forma que la gente las descubre por la mañana, a menudo acompañadas de cadáveres sin cabeza o solamente las cabezas. Las hay de todo tipo; desde un pequeño cartel hecho a mano hasta impresiones profesionales de diez metros de largo.